España Pierde en Amistosos Contra Italia
Italia venció este miércoles por 2-1 a España en un amistoso atractivo jugado en Bari y que quedó resuelto con un un afortunado gol de Acquilani a siete minutos del final.
Tanto españoles como italianos todavía andan en pretemporada y eso se notó indisimuladamente. Aunque el encuentro gustó porque los dos equipos quisieron jugar al fútbol, cada uno en su estilo.
La primera parte fue para Italia, pero España salió viva y se fue al descanso con empate 1-1. Y en la segunda, cuando España fue mejor, Italia desniveló el marcador con un disparo de Aquilani que tropezó en Javi Martínez y despistó irremediablemente a Víctor Valdés, el arquero visitante.
Italia fue mejor en la primera mitad y España se fue al descanso celebrando un empate que no mereció. La diferencia estuvo en la intensidad que aplicó la selección local, que magnificó aquello de "robar y correr".
Iker Casillas, como casi siempre, estuvo imperial para convertirse en el mejor jugador español. Vicente del Bosque, seleccionador de España, propuso un equipo lleno de novedades y atendiendo a aquellos que llegaron en mejor forma a la cita.
Los equipos españoles están en pretemporada y el técnico abandonó las jerarquías por un momento. Con todo, la defensa española sufrió muchísimo, especialmente al tirar el fuera de juego.
Italia apenas tardó cuatro minutos en avisar con un disparo de Criscito desde fuera del área que repelió el palo derecho de Casillas. El primer gol llegó a los 11 minutos, cuando los defensas españoles acusaron descoordinación y Montolivo lo aprovechó para quedarse solo delante de Casillas. El italiano marcó con un bonito toque elevado.
Las malas noticias continuaron para España porque a los 15 minutos se quedó sin Fernando Torres, quien sufrió un golpe fortuito en la cabeza. Entró Fernando Llorente, que ayudó mucho a su equipo.
El gol local fue casi una buena noticia para España. Primero, porque Italia, fiel a su fisonomía clásica, se replegó. Y, segundo, porque los visitantes se enteraron de que ahí había un partido.
España comenzó a combinar mejor en la medular, amparado en la actividad de David Silva y Andrés Iniesta. Aunque ello no evitó que a los 32 minutos Italia tuviera otra magnífica ocasión, cuando Giuseppe Rossi se quedó delante de Casillas y el arquero tapó como un gato.
Sin embargo, a la selección campeona del mundo todavía le quedaba la suerte y a los 38 minutos Chiellini cometió un absurdo penalti sobre Llorente que Xabi Alonso transformó.
El descanso llegó con una nueva ocasión de Italia, con un remate de cabeza de Cassano que se marchó cerca del larguero. España celebró las tablas.
En la segunda parte llegó el habitual carrusel de cambios y España se benefició a pesar de jugar con una defensa extraña, que incluyó a Sergio Busquets en un lateral y a Javi Martínez como central.
Además, entró Thiago Alcántara, quien a sus 20 años debutó con España. Dio dinamismo a la medular, aunque perdió demasiados balones.
La selección local se benefició de las combinaciones entre Silva y David Villa. Tanto fue así que casi toda la segunda parte se jugó en campo italiano.
Pero Italia sacó petróleo a siete minutos del final en una jugada aparentemente intrascendente. Aquilani disparó desde fuera del área sin demasiada fe, pero el balón tropezó en Javi Martínez, corrigió la trayectoria y dejó vencido a Valdés.
Italia celebró así un triunfo que le sirve para mantener la confianza en la revitalización de su fútbol. A cambio, España volvió a perder en un amistoso, algo que ya convirtió en costumbre. Antes fueron Argentina y Portugal, y ahora fue Italia.
Tanto españoles como italianos todavía andan en pretemporada y eso se notó indisimuladamente. Aunque el encuentro gustó porque los dos equipos quisieron jugar al fútbol, cada uno en su estilo.
La primera parte fue para Italia, pero España salió viva y se fue al descanso con empate 1-1. Y en la segunda, cuando España fue mejor, Italia desniveló el marcador con un disparo de Aquilani que tropezó en Javi Martínez y despistó irremediablemente a Víctor Valdés, el arquero visitante.
Italia fue mejor en la primera mitad y España se fue al descanso celebrando un empate que no mereció. La diferencia estuvo en la intensidad que aplicó la selección local, que magnificó aquello de "robar y correr".
Iker Casillas, como casi siempre, estuvo imperial para convertirse en el mejor jugador español. Vicente del Bosque, seleccionador de España, propuso un equipo lleno de novedades y atendiendo a aquellos que llegaron en mejor forma a la cita.
Los equipos españoles están en pretemporada y el técnico abandonó las jerarquías por un momento. Con todo, la defensa española sufrió muchísimo, especialmente al tirar el fuera de juego.
Italia apenas tardó cuatro minutos en avisar con un disparo de Criscito desde fuera del área que repelió el palo derecho de Casillas. El primer gol llegó a los 11 minutos, cuando los defensas españoles acusaron descoordinación y Montolivo lo aprovechó para quedarse solo delante de Casillas. El italiano marcó con un bonito toque elevado.
Las malas noticias continuaron para España porque a los 15 minutos se quedó sin Fernando Torres, quien sufrió un golpe fortuito en la cabeza. Entró Fernando Llorente, que ayudó mucho a su equipo.
El gol local fue casi una buena noticia para España. Primero, porque Italia, fiel a su fisonomía clásica, se replegó. Y, segundo, porque los visitantes se enteraron de que ahí había un partido.
España comenzó a combinar mejor en la medular, amparado en la actividad de David Silva y Andrés Iniesta. Aunque ello no evitó que a los 32 minutos Italia tuviera otra magnífica ocasión, cuando Giuseppe Rossi se quedó delante de Casillas y el arquero tapó como un gato.
Sin embargo, a la selección campeona del mundo todavía le quedaba la suerte y a los 38 minutos Chiellini cometió un absurdo penalti sobre Llorente que Xabi Alonso transformó.
El descanso llegó con una nueva ocasión de Italia, con un remate de cabeza de Cassano que se marchó cerca del larguero. España celebró las tablas.
En la segunda parte llegó el habitual carrusel de cambios y España se benefició a pesar de jugar con una defensa extraña, que incluyó a Sergio Busquets en un lateral y a Javi Martínez como central.
Además, entró Thiago Alcántara, quien a sus 20 años debutó con España. Dio dinamismo a la medular, aunque perdió demasiados balones.
La selección local se benefició de las combinaciones entre Silva y David Villa. Tanto fue así que casi toda la segunda parte se jugó en campo italiano.
Pero Italia sacó petróleo a siete minutos del final en una jugada aparentemente intrascendente. Aquilani disparó desde fuera del área sin demasiada fe, pero el balón tropezó en Javi Martínez, corrigió la trayectoria y dejó vencido a Valdés.
Italia celebró así un triunfo que le sirve para mantener la confianza en la revitalización de su fútbol. A cambio, España volvió a perder en un amistoso, algo que ya convirtió en costumbre. Antes fueron Argentina y Portugal, y ahora fue Italia.
0 comentarios:
Publicar un comentario